jueves, 17 de marzo de 2016

Capítulo 22. El método de las lenguas.

1.-Las lenguas se aprenden como instrumento para aumentar la erudición y comunicarla a otros.
Por lo tanto, no deben aprenderse todas porque es imposible, tampoco muchas porque es inútil, sino las necesarias solamente. Son necesarias: la propia, las lenguas vecinas, la latina para erudición en general, la griega y la hebrea para la teología.

2.-Deben aprenderse todas conforme a la necesidad; basta, aprenderlas lo suficiente para leer y entender los libros.

3.-El estudio de las lenguas debe ir paralelo al conocimiento de las cosas, a fin de que aprendamos a entender y expresar tantas cosas como palabras.

4.- No deben aprenderse los vocablos separadamente de las cosas porque están unidas.

5.- A nadie le es necesario el conocimiento completo de una lengua.

6.- Para formar a la vez el entendimiento y el lenguaje deberán proponerse a los niños cosas infantiles, dejando para la edad adulta lo propio de dicha edad, a fin de que ambas se desarrollen gradualmente.

7.- En cuanto a la poliglotía, con el siguiente método se conseguirá un resultado breve y con poco trabajo:
  I. Cada lengua debe aprenderse por separado: 
En primer lugar, la lengua corriente, luego aquellas que se emplean con frecuencia en los países circundantes. Una después de la otra, no al mismo tiempo.
II. Cada lengua tenga su tiempo determinado: 
 La lengua corriente, requiere necesariamente varios años, de ocho a diez. La lengua vulgar puede aprenderse en el espacio de un año.
III. Toda lengua debe aprenderse más con el uso que por medio de reglas. 
Esto es, oyendo, leyendo, volviendo a leer, copiando y haciendo ejercicios de palabra y por escrito con la mayor frecuencia posible.
IV.No obstante, las reglas servirán para ayudar y afirmar el uso. 
Desde luego, esto es de extrordinaria aplicación de las lenguas sabias.
V. Los preceptos referentes a las lenguas deben ser gramaticales, no filosóficos. 
Deben explicar sin arte alguno, cómo y qué ha de hacerse.
VI. La lengua más conocida ha de ser la norma de los preceptos que para la nueva lengua se escriban, de manera que solamnete se haga notar la diferencia de la una a la otra. 
VII. Los primeros ejercicios de la nueva lengua han de hacerse sobre materia conocida. 
De este modo no tendrá necesidad el entendimiento de aplicarse conjuntamente a las palabras y con más facilidad y prontitud se adueñará de ellas.
VIII. Todas las lenguas pueden aprenderse con el mismo y único método. 
Añadiendo preceptos muy fáciles que señalen tan sólo las diferencias respecto a la lengua conocida y con ejercicios sobre materias que sean también conocidas.

8.- La practica no requiere aprender casi a la perfección las lenguas, con excepción de dos de ellas y mediante cuatro grados:
Primera-edad ha de ser- Infantil, balbuciente-en la cual aprenderán a hablar-De cualquier modo. 
Segunda-edad ha de ser- Pueril, adolescente-en la cual aprenderán a hablar-Con propiedad.
Tercera-edad ha de ser- Juvenil, florida-en la cual aprenderán a hablar-Con elegancia.
Cuarta-edad ha de ser- Viril, potente-en la cual aprenderán a hablar-Con energia. 

9.- Se debe seguir estos cuatro grados sabiando escoger los instrumentos para aprender, ya sean libros didácticos o informadores.

10.- Los libros didácticos habrán de ser cuatro conforme a los grados de las edades:
I. El vestíbulo: algunos centenares de vocablos distribuidos en refranes o proverbios, llevando anejos unos cuadros de declinaciones y conjugaciones.
II.La puerta: vocablos más comunes, en sentencias breves con preceptos gramaticales breves y claros que expongan con sencillez la verdadera y genuina forma de escribir, formar, pronunciar y construir las voces de aquella lengua.
III.El palacio: encerrará en sí diversos discursos acerca de todas las cosas.
IV. El tesoro: se escogerán algunos de estos autores para ser leídos en la clase.

EL FIN ES: la perfección de la lengua.















miércoles, 16 de marzo de 2016

Capítulo 18. Fundamento de la solidez para aprender y enseñar.

Es lamentable que sea tan reducido el número de los que sacan de las escuelas una erudición sólida y en cambio la mayor parte apenas pasan de la superficie y la apariencia. La causa es porque las escuelas se dedican a lo endeble y frívolo, dejando lo fundamental, o porque los escolares dejan olvidar lo que aprendieron, haciendo pasar su entendimiento por muchos estudios sin provecho.
Se puede encontrar el modo de que cada uno pueda más de lo que aprenda, si
I.No se tratan más que las cosas sólidamente provechosas. s dichos.
II. Pero todas sin separación.
III.Todas se asientan en fundamentos sólidos.
IV. Los fundamentos se colocan profundos.
V. Todas se apoyan tan sólo en los fundamentos dichos.
VI.Se distingue por artículos o capítulos lo que deba distinguirse.
VII.Todo lo posterior se funda en lo anterior.
VIII. Todo lo coherente se enlaza siempre.
IX. Todo se dispone en relación en el entendimiento.
X. Todo se corrobora con ejercicios constantes.


Fundamento I
La naturaleza no emprende nada inútilmente. 
En las escuelas no deben tratarse otros asuntos sino aquellos que tieien una aplicación segurísima para esta vida y la futura; principalmente para la futura y produzcan verdadero y seguro fruto en la presente. 

Fundamento II


La naturaleza no omite nada de lo que estima provechoso para el cuerpo que forma.  
La escuela al intentar formar al hombre debe procurar formarlo totalmente para hacerle igualmente apto para los negocios de esta vida. En las escuelas debe enseñarse no sólo las letras sino buenas costumbres y piedad. Ciertamente, nada puede ser sólido si no es coherente consigo mismo en todos sentidos. 

Fundamento III


La naturaleza no hace cosa alguna sin fundamento.  
Los preceptores no trabajan por hacer a los discípulos dóciles y atentos antes de nada. No bosquejan e el entendimietno la idea general de la enseñanza que emprenden para que los discípulos cnozcan claramente lo que se hace y queda por hacer. 
Conclusión:
1.-Al empezar cualquier estudio debe excitarse en los discípulos una seria afición hacia él, con argumentos tomados de su exelencia, utilidad, hermosura, etc. 
2.-Antes de descender a su particular estudio, debe siempre fijarse en el entendimiento del que aprende la idea general de la lengua o arte objeto del mismo. 

Fundamento IV


La naturaleza echa raíces profundas.  
Debe estimarse seriamente la docilidad del discípulo como grabar profundamente la idea en su entendimiento; de tal manera, que nadie pase al estudio más intenso de un arte o de una lengua, sin asegurarse antes de que ha sido bien concebida y arraigada la idea general de dicha enseñanza. 

Fundamento V


La naturaleza produce todo de sus raíces propias, no de ningún otro origen.   
Educar rectamente a la juventud es abrir el entendimiento de las cosas para que broten arroyos de él. Hay que conocer e investigar las cosas mismas no las observaciones y testimonios ajenos acerca de ellas. 
Conclusión: 
1.-Todo debe deducirse de los principios inmutables de las cosas. 
2.- No se debe enseñar nada por la mera autoridad, sino que todo debe exponerse mediante la demostración sensual y racional. 
3.-En nada se empleará únicamente el método analítico; la síntesis con preferencia en todas las cosas. 

Fundamento VI
La naturaleza al disponer algo para muchos usos, lo diferencia con toda claridad.  
Al educar a la juventud deben hacerse todas las cosas con gran claridad de manera que no sólo el que enseña, sino también el que aprende, se de cuenta sin confusión de ningún género del lugar a donde llegar y lo que han de ejecutar, 

Fundamento VII


La naturaleza se halla en progreso continuo; jamás se detiene, nunca emprende cosas nuevas dejando a un lado las anteriores, sino que prosigue lo que empezó, lo aumenta y le da fin. 
En este método natural todos los antecedentes deben servir de base a los consiguientes; de otro modo no podrá haber solidez en lo que se haga. No se graba con solidez en la mente sino aquello que el entendimiento conoce rectamente y la memoria fija con cuidado. 
Conclusión: 
1.-Dispónganse los estudios de tal manera que los posteriores tengan su fundamento en los que preceden y éstos se afirmen y corroboren con los que van después. 
2.- Cuanto se ofrezca a la inteligencia, una vez bien percibido por el entendimiento, debe ser sólidamente fijado en la memoria. 

Fundamento VIII


La naturaleza enlaza todas las cosas con vínculos perpetuos.  
Apoyar todo con razones es enseñarlo por sus propias causas; esto es, demostrar no solamente cómo es una cosas, sino por qué no puede ser de modo diferente. Saber es conocer las coas por sus causas. 
Conclusión: 
1.-Deben de tal manera organizarse los estudios de toda la vida que formen como una Enciclopedia, en la que nada haya que no provenga de la común raíz ni esté en su lugar debido. 
2.- Todas cuantas cuestiones se resuelvan han de ser de tal manera racionalmente fundamentadas que no dejen lugar ni a la duda ni al olvido. 


Fundamento IX
La naturaleza guarda proporción entre la raíz y las ramas, tanto respecto de la cantidad como de la cualidad. 
La erudición, la cual aunque, primeramente hay que concebirla, desarrollarla y afirmarla en la raíz interna de la inteligencia, hay no obstante, que procurar al mismo tiempo que se extienda visiblemente al exterior . Lo que se aprende a entender se aprenda también a hablar y obrar, o sea ejercitarlo, y viceversa. 
Conclusión: 
1.-Todo cuanto se perciba, considérese al punto qué uso puede tener para que nads se aprenda en vano. 
2.- Todo cuanto se perciba transmítase a otros para que ellos lo comuniquen a los demás, a fin de no saber nada en vano.
3.-TU SABER NO ES SINO QUE OTRO SEPA LO QUE TÚ SABES. 

Fundamento X


La naturaleza vive y se robustece con movimiento frecuente. 
No es posible esperar solidez en la instrucción, sin repeticiones y ejercicios en extremo frecuentes y hábilmente preparados. 
Conclusión: 
1.-Busque y aprehenda el alimento del espíritu. 
2.- Rumie y difiera lo hallado y aprehendido.
3.-Asimile lo diferido y lo comunique a los demás. 

lunes, 7 de marzo de 2016

Capítulo 17. Fundamentos de la FACILIDAD para enseñar y aprender.

Fácilmente puede instruirse la juventud si:
I. Se comienza temprano antes de la corrupción de la inteligencia.
2.- Se actúa con la debida preparación de los espíritus.
3.- Se procede de lo general a lo particular
IV.- Y de lo más fácil a lo más difícil.
V.- Si no se carga con exceso a ninguno de los que han de aprender.
VI.-Y se procede despacio en todo.
VII.-Y se enseña todo por los sentidos actuales.
IX.-Y para uso del presente.
X.-Y siempre por un solo y mismo método.


Fundamento I
Hay que tomar materia pura  
Los entendimientos tiernos, aún no acostumbrados a distraerse en otras ocupaciones, son más a propósito para recibir con facilidad las enseñanzas de la sabiduría. Cuanto más tardíamente se empiece la formación mayor será la dificultad que se encontrará por estar ya la mente ocupada con otras cosas. En segundo lugar, los niños no pueden ser instruidos por muchos preceptores ala vez porque no es probable que todos tengan la misma forma de enseñar, lo cual causaría distracción  para sus entendimientos y un obstáculo para su formación. En tercer lugar, se deben formar buenas costumbres con el fin de que sean aptos para todo lo demás. 
Conclusión:
1.-La formación de la juventud empiece temprano.
2.-No debe haber más que un solo Preceptor para el mismo discípulo en cada materia. 
3.-Antes de nada procúrese la armonía de las costumbres del arbitro formador.

Fundamento II
La materia se dispone para apetecer la forma.  
Los niños que son obligados a estudiar contra su voluntad proceden de mala manera.
I. Por todos los medios hay que encender en los niños el deseo de saber y aprender
II. El método de enseñar debe disminuir el trabajo de aprender de tal modo que no hay a nada que moleste a los discípulos ni los paarte de la continuación de los estudios.

El deseo de aprender puede encenderse en los niños y ser fomentado por los padres, los preceptores, la escuela, las cosas mismas, el método y los gobernantes.
1.- Por los padres: si ensalzan la erudición y alaban a los eruditos, si los estimulan con regalos.
2.- Por los preceptores: si tratan a los discípulos con amor, fácilmente robarán su corazón de tal modo que prefieran estar en la escuela mejor que en su casa.
3.- La escuela misma: debe ser un lugar agradable y brindar encanto por dentro y por fuera,
4.- Las cosas mismas: jocosas o menos serias. Mezclar lo útil con lo dulce.
5.- Por el método que sea natural: que marche a su propio ritmo y que las cosas aún más serias se traten de modo familiar y ameno.
6.- Magistrados y rectores de las escuelas: si reparten sin favor entre  los más aplicados alabanzas y premios.


Fundamento III
La naturaleza saca todo de sus principios, pequeños en tamaño, potentes en energía. 
La mayor parte de los preceptorespretender imbuir el caos de las conclusiones diversas y textos completos en lugar de los principios fundamentales. 
Conclusión:
1.- Toda arte debe ser encerrada en reglas brevísimas, pero muy exactas.
2.- Toda regla ha de ser expresada en muy pocas palabras, pero claras en extremo.
3.- A toda regla han de acompañarse muchos ejemplos para que su utilidad sea manifiesta, por muchas aplicaciones que la regla tenga.


Fundamento IV
La naturaleza procede de lo más fácil a lo más difícil. 
Muchas veces se enseña en las escuelas lo que desconocemos por medio de otra cosa que tmabién nos es desconocida. 
Conclusión:
1.- El preceptor y el alumno deben hablar el mismo idioma.
2.- Todas las explicaciones de las cosas se hacen en la lengua conocida.
3.- Toda gramática y diccionario se adaptan a la lengua mediante la cual ha de aprenderse la nueva.
4.-El estudio de la nueva lengua se hace gradualmente de manera que el discípulo se acostumbre: primero a entender, después a escribir, y por último a hablar.
5.- Primero van las más comunes y después las particulares.
6,-Primero se deben conocer los objetos proximos, después los más cercanos, luego los lejanos y por fin los más remotos. Poner ejemplos tomados del uso diario.
7.-Se ejercitan en los niños en primer lugar los sentidos, después la memoria, luego el entendimiento y por último el juicio.

FundamentoV
La naturaleza no se recarga con exceso; se contenta con poco.
Origina la distracción el proponer a los espíritus diversas materias al mismo tiempo. 

Fundamento VI
La naturaleza no se precipita; procede por el contrario con lentitud. 
Es un destrozo para la juventud decicar seis u ocho horas cada día a lecciones y ejercicios, recargar hasta la saciedad y aprender de memoria 
Conclusión:
1.- Se debe destinar pocas cosas a las lecciones públicas, a saber: cuatro y deje otras tantas para los estudios privados.
2.- Fatigue lo menos posible la mamoria; es decir, sólo con lo fundamental, dejando correr libremente lo demás.
3.- Enseñe todo conforme a la capacidad, que aumenta con la edad y adelanto de los estudios.


Fundamento VII
La naturaleza no produce sino lo que puede salir por sí una vez maduro interiormente. 
Es un destrozo para la juventud decicar seis u ocho horas cada día a lecciones y ejercicios, recargar hasta la saciedad y aprender de memoria Siempre se ejerce violencia en los entendimientos, se les imbuye lo que a edad y el discernimiento no alcanzan. Cuando se les obliga a confiar o ejecutar algo sin previa y suficiente explicación, declaración e instrucción acerca de ello. 
Conclusión:
1.- No se emprenda con la juventud sino lo que la edad y el ingenio no solamente alcanzan, sino piden.
2.- No se haga aprender de memoria sino lo que haya sido rectamente comprenido por la inteligencia. Y no se exija a la memoria más que lo que estemos ciertos que sabe en niño.
3.- No se mande hacer sino aquello cuya forma y modo de imitar haya sido suficientemente enseñado.


Fundamento VIII
La naturaleza se ayuda a sí misma por todos los medios que puede. 
Los preceptores encomiendan un trabajo a los discípulos, ni les manifiesta con claridad en qué consiste, no les enseña cómo debe ejecutarse ni mucho menos auxilia a quienes lo intentan hacer, sino que los obliga a sudar y asustarse. Si hacen algo malo, son maltratados. 
Conclusión:
1.- No se consigue con azotes por causa de la enseñanza.
2.- Lo que han de aprender los discípulos se les debe proponer y explicar tan claramente que lo tengan ante sí como sus cinco dedos.
3.- Para aprender todo con mayor facilidad deben utilizarse cuantos más sentidos se pueda.


Fundamento IX
La naturaleza no produce sino lo que tiene un uso claro e inmediato. 
Se aumenta la facilidad en el discípulo si le haces ver la aplicación que en la vida común cotidiana tiene todo lo que le enseñes. 
Conclusión:
1.- Nada se enseñe sino para su uso inmediato.


Fundamento X
La Naturaleza ejecuta todas las cosas con uniformidad. 
La diversidad de métodos confunde a la juventud y hace más intrincados los estudios. 
Conclusión:
1.- Haya solo y mismo método para enseñar las ciencias; uno sólo y el mismo para todas las artes; uno sólo e idéntico para todas las lenguas,
2.-En cada escuela se siga el mismo orden y procedimiento en todo los ejercicios.
3.. En cuanto sea posible sean iguales las ediciones de los libros en cada materia.














Capítulo 16. Requisitos generales para aprender y enseñar, esto es: de qué modo debemos enseñar y aprender con tal seguridad que necesarimante hayan de ep

El método de enseñar ha de fundarse en el arte, no se trata de la ciencia y la casualidad, sino del arte con que el podemos prevenir lo fortuito.
Fundamento I
Nada acontece fuera de su tiempo, se efectúa de un modo gradual para construir finalmente una obra. 
En las escuelas no utilizan el tiempo adecuado para el desarrollo del entendimiento ni tampoco se dispone de ejercicios con tal cuidado que todo se verifique infaliblemente por sus pasos contados. 
Conclusión:
1.-Las formación del hombre debe empezarse en la niñez.
2.-Las horas de la mañana son las más adecuadas para los estudios. 
3.-Todo lo que se debe aprender debe escalonarse conforme a los grados de la edad. 

Fundamento II
La naturaleza prepara la materia antes de empezar a adalptarle la forma. 
Sin embargo, las escuelas no cuidan de tener dispuestos los materiales requeridos como libros, modelos, ideas, etc. que son adquiridos a medida que van siendo necesitados. En la enseñanza, enseñan las palabras antes que las cosas, cuando debería ser al revés. En el estudio de las lenguas, primero se debe enseñar a leer buenos autores y un diccionario sabiamente ilustrado y después la gramática. 
Conclusión:
1.-Deben estar de antemano dispuestos los libros y demás instrumentos. 
2.-Que se forme el entendimiento antes que la lengua.
3.-Que ninguna lengua se aprenda por la gramática, sino mediante el uso de autores adecuados. 
4.-Que las enseñanzas reales vayan antes que las organicas.
5.- Que los ejemplos precedan a las reglas. 

Fundamento III
Debe hacerse adecuada la materia para recibir la forma.  
En las escuelas no se admiten a los jovenes obtusos ni necios, alejandolos del resto antes de excitar el deseo de aprender  las ciencias, costumbres y piedad. No pueden limpiar su espíritu de ocupaciones superfluas por medio de la disciplina y obligandolos a adquirir el orden. 
Conclusión:
1.-Todo el que entre a la escuela, debe tener perseverancia. 
2.-Para cualquier estudio hay que preparar el espíritu  de los discípulos. 
3.-Hay que despojar de impedimientos a los discípulos. 

Fundamento IV
Todo se forma claramente sin confusión alguna.  
En las escuelas existió la confusión de  enseñar a los discípulos muchas cosas a un tiempo. 
Conclusión:
1.-Las materias se deben impartir una por una y terminarlas completamente con todo el entendimiento posible.
2.-Los discípulos deben ocuparse en cada momento de una sola cosa. 


Fundamento V
Lo más interno en primer lugar. 
En las escuelas se pretende realizar la formación de la juventud dictando y exigiendo mucho a la memoria sin una diligente investigación de las cosas.
Conclusión:
1.-Debe formarse primero el entendimiento de las cosas; después de  la memoria y por último de la lengua. 
2.-El preceptor debe abrir el entendimiento  a través de muchos medios y utilizarlos congruentemente.  

Fundamento VI
Lo general en primer término  
En las escuelas se enseñan mal las ciencias porque su enseñanza no va precedida de un vago y general diseño de toda la cultura; por otra parte, las artes, las ciencias y los idiomas también son enseñados sin previos rudimentos. 
Conclusión:
1.-Se construyan los cimientos de la erudición general desde el primer momento de su formación.
2.-Cualquier idioma, ciencia o arte se enseñe primero por los más sencillos rudimentos para que tenga de ella total idea. 

Fundamento VII
Todo gradualmente; nada de saltos.   
En las escuelas los estudios no sólamente van unas cosas después de otras, sino que cada una de ellas se desenvuelve dentro de límites determinados. 
Conclusión:
1.-El núcleo de los estudios debe distribuirse cuidadosamente en clases, a fin de que los primeros abran el camino a los posteriores y les den sus luces.
2.-Hay que hacer una escrupulosa distribución del tiempo para que cada año, mes, día y hora, tenga su particular ocupación. 
3.-Debe observarse estrictamente la extensión del tiempo y el trabajo para que nada se omita ni se trastorne nada. 

Fundamento VIII
No hay que cesar hasta no terminar la obra.    
En las escuelas se procede dañosamente si los niños van periódicamente con intervalos de meses o años a la escuela y durante otros periódos se dedican a otros asuntos, sin llevar nada hacia el fin seriamente. 
Conclusión:
1.-Al que haya de ir a la escuela reténgasele en ellla hasta que se convierta en hombre erudito, de buenas constumbres y religioso. 
2.-La escuela debe estar en lugar tranquilo, separado de las turbas y barullos.  
3.-Lo que, según esté establecido, haya que hacer, hágase sin interrumpción alguna. 
4.- No deben otorgarse a nadie salidas ni vagancias. 


Fundamento IX
Evitar lo contrario y nocivo.   
En las escuelas se procede con poca prudencia cuando en el cominezo de los estudios se proponen controversias a la juventud. 
Conclusión:
1.-Que los discípulos no tengan abundancia de libros, a no ser los de su clase. 
2.-Que los libros referidos estén de tal modo preparados que no pueda aprendese en ellos sino sabiduría, piedad y buenas costumbres.   
3.-No deben tolerarse compañías disolutas ni en las escuelas ni cerca de ellas. 
4.- Si todo esto se observa con cuidado seguramente las escuelas llenarán su fin.  


domingo, 6 de marzo de 2016

Capítulo 13. El fundamento de la reforma de las escuelas es procurar el orden en todo.

Lo que está ordenado, conserva su estado e incólume existencia mientras matniene este orden. Si el orden falta, desfallece, se arruina, se cae. Un reloj produce movimientos espontáneos, marca armónicamente los minutos, horas, días, meses y hasta años, no solamente mostrándolo a la vista. Una disposición tal de todos cuantos elementos integran, en su exacto número, medida y orden, que cada uno de ellos tiene un fin determinado pero si algo se descompone, rompe, quiebra, retrasa o tuerce, aunque sea la más pequeña rueda, el más insignificante eje, el más diminuto clavo, al momento se para o hace con error todas sus indicaciones. 
El arte de enseñar requiere una ingeniosa disposición del timepo, los objetos y el método. Si podemos conseguirla, no será difícil enseñar todo a la juventud escolar, cualquiera que sea su número. Las escuelas se deben dar en una organización que responda al modelo del relojs, ingeniosamente construido y elegantemente decorado. 

Capítulo 12. Las escuelas pueden reformarse para mejorarlas.

Comenio manifestó una organización de las escuelas con promesas y después con qué  razones:
1.- Una escuela en la que pueda instruirse toda la juventud. 
2.-Se instruya en todo aquello que puede hacer al hombre sabio, probo y santo. 
3.- Se ha de realizar esta preparación de la vida de modo que termine antes de la edad adulta. 
4.- Que se verifique sin castigos ni rigor, leve y suavemente, sin coacción alguna y como de un modo natural.
5.- Que se le prepare para adquirir un conocimiento verdadero y sólido, no falso y superficial.
6.- Que la enseñanza sea fácil en extremo y no fatigosa. 

Comenio hizo referencia a sucesos antigüos tales como el descubrimiento de América, de la pólvora y de la escritura, que antes de ellos nadie los creía posibles,  al igual que su nueva escuela. 
Toda la juventud debía instruirse en letras, costumbres y piedad sin ninguna de las molestias y dificultades que con el método corriente se ocasionan tanto a maestros como a discípulos. Cada cosa tiende espontáneamente a obrar conforme a la aptitud con que fue creada, cuando sienten que tienen el sugiciente vigor y obra seguramente si se le ayuda, aunque sea muy poco. 
No hay en todo el mundo un ser humano que no pueda llegar a la altura más elevada por grados bien colocados, completos, sólidos y seguros. A pesar de que existan entendimientos obtusos a los cuales no se les pueda inculcar nada, sólo necesitan ser pulidos y estimulados antes para que aprendan las cosas. 
Aristóteles afirmó que el deseo de saber es innato. Algunos jóvenes desvían su atención a otras cosas exteriores, no tienen deseo por lo que se desconoce y no pueden recobrarse fácilmente. El entendimiento preocupado por en un sentido no atiende suficientemente lo que provenga de otra dirección pero si se intenta corregir al torpeza y volver a su naturaleza tendrá deseo de saber. 
Antes de formar a la juventud, se le debe hacer apta para recibir esa formacioón, haciendole apetecer de cultura. 

Comenio postuló ses diferentes temperamentos de ingenios: 
1.- Los agudos, ávidos y dúctiles: son los únicos que crecen rápidamente si se procede con prudencia para que no vayan más de prisa de lo conveniente, a fin de que no decaigan prematuramente y se tornen estériles.
2.- Los agudos pero lentos, aunque complacientes: sólo necesitan espuela. (?)
3.- Los agudos y ávidos pero brucos y tozudos: son los más odiados en las escuelas, suelen ser hombres grandes si se les educa con acierto. Muchos ingenios que nacen despiertos perecen por culpa de sus educadores, que convierten a los adolescentes en asnos porque no saben gobernar a los rectos y libres. 
4.-Simpáticos y ávidos de aprender pero tardos y obtusos: para que sean exitosos hay que condescender con su debilidad, no imponiéndoles nada con severidad ni exigiéndoselo con dureza, más bien tener una tolerancia benigna en todo, estimulando, apoyando y levantando su espíritu para que no decaigan. Tardarán más en llegar a la meta pero persisten durante más tiempo, son más tenaces y con dificultad dejan perder las cosas una vez que las aprendieron. 
5.-Obtusos, indolentes y perezosos: requieren mucha prudencia y paciencia extraordinaria. 
6.-Obtusos de torcida y malvada índole, perdidos la mayor parte de las veces: debemos intentar corregir y extirpar la pertinacia, sino se consigue, habrá que deshacerse de él. 

Plutarco decía: Nadie tiene en su mano disponer cómo han de nacer los hijos, pero es facultad nuestra que se hagan buenos con una recta educación.


Comenio escribió un método con el cual se podía instruir y formar una juventud de índole tan diversa:
Primeramente: todos los hombres han de ser encaminados a los mismo fines de Ciencia, Costumbres y Santidad.
Segundo lugar: todos los hombres, sea cualquiera la direrencia de sus cualidades, tienen una ínica e igual naturaleza humana dotada de los mismo órganos.
Tercero: la expresada diversidad de cualidades no es sino exceso o defecto de la armonía natural así que el remedio para los vicios del entendimiento humano será un método tal que los excesos y defectos del espíritu se compensen y se ordenen todas las cosas a la consecusión de la mayor armonía y concierto. 
Cuarto: es más fácil atender a los aludidos excesos y defectos del espíritu cuando son recientes.
Finalmente, el mutuo auxilio es esencial para el entendimiento en la adolescencia; un maestro que encomienda al que vea más despierto el cuidado de instruir a dos o tres más tardos, así se proveerán unos a otros. 


Capítulo 7. La formación del hombre se hace muy fácilmente en la primera edad, y no puede hacerse sino en ésta.

Comenio nos expone una relación de semejanza entre el hombre y las plantas. Una planta no puede dar buenos frutos si no es regada y podada por un buen jardinero; lo mismo pasa con los hombres, un hombre no puede ser sabio, honesto y piadoso si no es educado de esta manera. 

Planteaba seis fundamentos de lo afirmado en cuanto a los hombres: 
1.- La incertidumbre de la vida presente: lo único que sabemos es que hay que vivir, pero el dónde y cuándo no se sabe
2.-Que se instruya para las acciones de la vida antes de empezar a obrar: una persona primero debe instruirse para las acciones de la vida sino caeríamos antes de obrar; es por eso que la vida debe pasarse operando y no aprendiendo, puesto que existen infinitas cosas que tenemos que aprender. Un hombre tiene mucho que conocer, experimentar y conseguir. 
3.-Todas las cosas más fácilmente se forman mientras son tiernas: cuando algo es tierno se dobla y conforma pero cuando algo es duro resiste el intento. El cerebro humano está húmedo y blando en la niñez; hay mayor ardor, ingenio rápido y la memoria es tenaz, por eso aprendemos demasiado;sin embargo, poco a poco se reseca y endurece hasta el punto de que la experiencia dificilmente se imprime o se esculpe en el cerebro.
4.-No hay que emplear de otro modo el gran espacio de adolescencia concedido al hombre: la naturaleza concedió al hombre la etapad de la adolescencia exclusivamente para formarnos educativamente, haciendonos inhábiles para otras cosas,  y hacernos más aptos para una vida futura.
5.-Unicamente es sólido y estable lo que la primera edad asimila: en el hombre, las primeras impresiones de conocimiento se fijan en la mente que dificilmente se llegan modifcar, por eso es conveniente dirigir esos conocimientos hacia la sabiduría. 
6.-No educar correctamente, es cosa de gran peligro: si el alma de un hombre no se emplea para cosas útiles se etregaría a otras cosas vanas y nocivas que serían imposibles o difcíles de cambiar. 

La conclusión final fue que a un ser humano se le debe proveer una buena formación desde pequeños para obtener éxitos felices en sus costumbres. 

Opinión Personal sobre Juan Amós Comenio

¿Qué aprendí de Comenio? 

El rompimiento del  paradigma de la educación, establecido en el sistema de la época moderna fue una tarea ardua que casi le cuesta la vida; sin embargo, fue determinante para el nacimiento de la pedagogía como ciencia y sin su sacrificio, la pedagogía hoy no sería vista de la misma manera, ni siquiera existiría su Didáctica Magna, ni el método activo que propuso. 

¿Qué me gustaría saber más sobre Comenio?

Me gustaría saber cuántas veces tuvo que experimentar  con el método activo antes de que supiera que sí funcionaba y también, qué otros métodos utilizó o inventó para enseñar. 

jueves, 3 de marzo de 2016

Síntesis del prólogo de Didáctica Magna

Juan Amós Comenio nació en Nivnice ubicado en la República de Checoslovaquia el 28 de Marzo de 1592. Debido a su ubicación geográfica, ha sido un territorio por el cual muchos ejércitos han desfilado, así como también un campo de batalla entre poderosos imperios; por ese motivo la vida de Comenio resultó caótica.
La vocación de Comenio por el estudio fue evidente desde sus primeros años de educación hasta la universidad, por ser siempre un alumno destacado. Al concluir sus estudios universitarios, leyó “Las revoluciones orbitales de los astros” de Copérnico, donde demostraba su teoría heliocéntrica la cual  proclamó una revolución astronómica.
Este postulado le dio una idea a Comenio: el niño tenía que ser visto como centro de la educación y los maestros, textos, aulas y métodos, debían girar en torno a él. Esta teoría fue llamada paidocentrismo.
El sistema Comeniano consistía en sonreírles a los alumnos, explicaba la lección para que la entendieran, luego, ayudaba a los alumnos a que ellos mismos elaboraran los conceptos explicados, hasta que quedaban fijos en su memoria y finalmente, los ponía a ejercitar los conceptos en cosas prácticas de la vida: comprender, retener y practicar. En caso del aprendizaje de las lenguas, las reglas debía redactarlas el aprendiz una vez dominando ya la lengua aprendida.
Comenio fue un maestro y sacerdote que consideraba la educación como factor determinante para la pacificación y el progreso de la humanidad. La diferencia abismal entre la aristocracia y los pobres, lo motivo a dar cátedras y predicaciones para elevar los ánimos de los pobres y evitar una revolución.
Después de una serie de eventos desafortunados, Comenio, como refugiado en Suecia, fue maestro de la reina Cristina quien le dio la pauta para el surgimiento de una revolución paidocéntrica. De esta forma se inició en Suecia la reforma educativa.    
Descartés y Comenio entablaron un diálogo donde ambos coincidieron en la plataforma de la filosofía baconiana. Los filósofos y pedagogos de la edad moderna se debían guiar de la razón, basándose en la experiencia.
Comenio organizó el Congreso de Torun en el año de 1645 para unificar a la humanidad, sin embargo, no obtuvo ningún resultado. Mientras tanto, decidió impartir clases en las cuales hizo experimentos teatrales para el aprendizaje escolar. “Orbis Pictus” fue el primero texto de educación audiovisual en la historia de la pedagogía.
Debido a sus fracasos en la acción política se refugió en la enseñanza, pero debido al acoso incesante, volvió a fracasar y se resignó a escribir obras pedagógicas como la “Opera Didáctica Omnia” o Summa pedagógica donde se encuentran recopiladas todas ellas.
En la antigüedad, se creía que la pedagogía era un quehacer de ayos pero Comenio transformó el hacer de la enseñanza de los niños en una ciencia de la educación y una técnica de la enseñanza. Fue el precursor de los jardines de niños puesto que quiso que cada hogar fuera una escuela materna durante los primeros seis años del niño.
Perseguido por sus enemigos, Comenio tuvo que buscar asilo en Holanda, donde pudo recopilar sus escritos pedagógicos, como “La Didáctica Magna” que fue publicada en Ámsterdam en el año de 1657. La “Didáctica Magna” es el primer manual de la técnica de la enseñanza, basada sobre principios científicos que hacen de la educación una ciencia.

 Su último intento por liberar a Checoslovaquia de los Habsburgo envió una ponencia titulada “El ángel de la paz” a la Junta de Breda sobre la manera de lograr la paz entre Inglaterra y Holanda. Su muerte fue el día 15 de Noviembre de 1670 a los 78 años de edad.